Al señor Blanco y al coro de concejales que le venera mayormente para conservar la soldada, les importa un bledo que las empresas concesionarias de servicios municipales incumplan reiteradamente los pliegos de condiciones administrativas y técnicas, documento contractual que regula toda la vida de un contrato, y que se convierte en pieza clave para el control eficaz de la Administración sobre el concesionario.

Es en estos documentos donde se recogen las condiciones de prestación del servicio así como las obligaciones del concesionario y los mecanismos de inspección, vigilancia y control que establece la Administración para comprobar el cumplimiento de las obligaciones que se le imponen al concesionario. De su adecuada preparación y redacción dependerá en gran medida el éxito o el fracaso de este modo de gestión que implica no sólo al operador privado en la tarea de prestar servicios a los ciudadanos y ciudadanas, sino también al gobierno. La gestión indirecta de un servicio a través de una concesión administrativa no disminuye de ninguna manera la responsabilidad de la Administración por su adecuado funcionamiento. Antes al contrario, la responsabilidad se vuelve especialmente intensa cuando el servicio comienza a prestarse por una empresa privada. Le recordamos al señor Blanco que cuando se opta por la gestión indirecta de un servicio, la Administración municipal pasa de la posición de prestador del mismo a la posición de planificador, organizador, controlador y evaluador de los servicios que prestan las empresas concesionarias. Sin embargo, esto no sucede en Azuqueca de Henares debido a que el gobierno municipal no cumple con la obligación de vigilarlas muy de cerca.

Tal es el caso de La Alameda, Agua y Salud (grupo RAYET), empresa concesionaria de la piscina climatizada que campa a sus anchas, sin que ningún concejal de deportes hasta el momento haya sido capaz de ponerle los puntos sobre las íes. Instalaciones totalmente abandonadas, vulneración derechos fundamentales de trabajadores (en el año 2015 por el Tribunal Superior de Justicia de Castilla La Mancha la condenaba por vulnerar los derechos de una trabajadora), que tienen que soportar las continuas coacciones de los responsables por miedo a ser despedidos y ninguneo constante a los usuarios, muchos de los cuales se han visto obligados a recurrir a la Justicia. Esto es posible porque cuenta con la mirada cómplice del responsable del ramo, Sergio de Luz, que desde luego, no está cumpliendo con su deber.

El máximo responsable de que la concesionaria se comporte así es sin duda el señor Alcalde a la cabeza, que lejos de rescindir el contrato por incumplimiento reiterado de sus obligaciones, decide mantenerla al frente de la instalación demostrando así lo poco que le importa lo que le suceda a usuarios y a empleados.

Para la portavoz del grupo municipal de IU, Mª José Pérez, «la situación actual de esta instalación municipal exige un cambio urgente en su gestión, que procure la necesaria eficiencia y sostenibilidad que la haga viable, sobre la base de un marco de condiciones y obligaciones que sea riguroso fundamentalmente en los aspectos técnicos, económicos, humanos y de control. Azuqueca de Henares no se merece concesionarios así de sus servicios municipales. Y menos aún un gobierno consentidor y garbancero, liberado al cien por cien con cargo al presupuesto municipal, que les ríe las gracias mientras se pasan la ley por los fondillos. Es un despropósito que el Alcalde permita que una concesionaria que gestiona una instalación municipal se comporte de es esta manera con total descaro. Por ello, exigimos a Blanco que adopte medidas urgentes de una vez por todas contra la concesionaria de este servicio, porque estamos hartos de su silencio y de una complicidad inexplicable con una empresa que incumple de manera reiterada no sólo el pliego de condiciones, sino que además se pitorrea de los trabajadores y de los usuarios».