En la sesión plenaria del 13 de junio, Izquierda Unida presentaba dos mociones, una denunciando los problemas que afectan al transporte sanitario de Guadalajara y otra, solicitando que el Ayuntamiento atienda a  las personas que se encuentran en situación de pobreza extrema en el municipio y que han tenido que ocupar edificios abandonados para procurar un techo a sus familias.

“Con la primera moción recogíamos la reivindicación hecha por la Plataforma en Defensa de la Sanidad Pública y de los trabajadores a través de sus sindicatos sobre el incumplimiento reiterado de las cláusulas administrativas y prescripciones técnicas del pliego”, manifiesta la portavoz del grupo municipal de IU, Mª José Pérez Salazar.

“Retrasos en los pagos a los arrendatarios de pisos que se utilizan como base de descanso, donde los trabajadores están y pernoctan hasta que son activados, como ha sucedido en Azuqueca, impagos desde hace meses en restaurantes donde los trabajadores comen, desperfectos y excesivas antigüedad en las ambulancias, falta de calefacción en vehículos, que se suple con calefactores portátiles, falta de personal, etc.”.

“Sin embargo, la señora Martín, responsable de Promoción de la Salud, lejos de argumentar los motivos por los cuales votan en contra del texto, se ciñó a decir que mentíamos, que las imágenes mostradas en el propio pleno sobre el estado de las ambulancias eran falsas y que el local donde se ubica la base de Azuqueca se encuentra en perfectas condiciones. Por eso, días antes se nos impidió a las portavoces de los distintos grupos el paso al local bajo amenaza de sanción a cualquier trabajador que lo permitiera. Qué casualidad”.

“Así es como las gastas la señora Martín, que demostró una vez más que su lealtad al partido está por encima de todo, incluso de las vecinas y vecinos de nuestro municipio”. Manifiesta Pérez.

Según la portavoz de IU, “no distó mucho el comportamiento de la señora Cansado, responsable de Cohesión Social cuando se debatió nuestra segunda moción. No traía ni un dato de las personas que malviven en unos de los edificios abandonados del municipio. No sabía el número de mayores, ni de niños, ni de mujeres embarazadas, ni de personas enfermas, ni si comen o no comen porque les importa un bledo. Para ella, para el señor Alcalde, y para el resto de sus compañeros y compañeras estas personas son invisibles, no cuentan, no existen, no están y todo porque no votan. Eso es lo único que les preocupa, el voto”.

Que una concejala de Cohesión Social se permita decir en un Pleno que hay que tener cuidado con estas cosas porque de lo contrario se puede producir el efecto llamada y el estado de bienestar se tambalea, sin tan siquiera haberse personado en el edificio para conocer de primera mano a las personas que allí habitan, indica que no está capacitada para esta al frente de este área, principalmente, por su falta de sensibilidad.

“Pues desde nuestra formación le recordamos a las dos concejalas, al señor Alcalde y al Equipo de gobierno en su totalidad que la sanidad pública se defiende independientemente del color político porque es un derecho básico, cosa que no hacen y que vamos a estar muy vigilantes de los pasos que den ante la posibilidad de que se produzca el desalojo de todas esa familias a las que hacía referencia nuestra moción. No le vamos a consentir a este gobierno que los abandone a su suerte”, finaliza Pérez.