El grupo municipal de IU presentaba en el día de ayer una denuncia ante la Inspección Provincial de Trabajo debido a las condiciones de inseguridad laboral en las que se encontraban los trabajadores que estaban realizando el montaje de la plaza de toros.
“A la presunta falsa certificación que aseguraba la idoneidad de una plaza que aún no había siso instalada, se le suma el riesgo laboral en el que se encontraban, el pasado 13 de septiembre, las personas encargadas del montaje”, afirma la portavoz del grupo, María José Pérez Salazar.
Según Pérez, “la siniestralidad laboral es uno de los problemas más graves del panorama laboral en nuestro país. Se trata de un problema asociado a la precariedad y temporalidad laboral. La prevención de riesgos laborales tiene una doble vertiente ya que, por un lado, es un derecho de los trabajadores y por otro, una obligación de las empresas. Así pues, cualquier empresa o empresario que cuente con uno o más trabajadores a su cargo, está obligado a velar por la seguridad de sus empleados y a la vez, a cumplir con la Ley de Prevención de Riesgos Laborales.
Aun cuando la responsabilidad la tenga la empresa, una Administración debe saber que cuando contrata un servicio, tiene que asegurarse de que la empresa cumple con la normativa vigente. Es lamentable que en nuestro municipio, El Alcalde y la Concejala de festejos se despreocupasen de un asunto tan importante como es la seguridad de los empleados. Un gobierno responsable debería estar pendiente de estas cuestiones, pero ya sabemos que su preocupación por estar presentes en todos los actos y a alcanzar el mayor número de enfoques de las cámaras, les hace descuidar lo verdaderamente importante como es la seguridad de las personas”.
“Esperemos que el día que se proceda a desmontar la plaza de toros, los trabajadores cumplan las normas de seguridad reglamentarias porque es muy probable que la autoridad competente esté presente para exigirlas”, finaliza la portavoz.