Una amplia representación de trabajadores de la administración pública autonómica de nuestra provincia se concentró a las 12’00 frente a la Delegación de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, situada en la Plaza del Jardinillo, para protestar contra los recortes salvajes aplicados por el gobierno de Cospedal. La concentración forma parte de la jornada de huelga general en la función pública autonómica convocada por ocho sindicatos, y a la que están llamados los 70.000 trabajadores de la administración regional.
La señora Cospedal llegó al gobierno prometiendo trabajo y regeneración. Nueve meses después, su ejecutoria es un desmentido absoluto a sus promesas. En cuanto al trabajo, con Cospedal hay más paro que nunca, a lo cual ha contribuido con una generosa aportación de 6.000 interinos y otros contratados públicos que han sido despedidos por orden suya. Eso sin contar con los parados del sector privado, que no dejan de crecer a un ritmo intolerable. Y por lo que respecta a la regeneración, su gobierno se ha caracterizado por aplicar medidas de ajuste más inmisericordes que sus antecesores, de modo que aquí no se observa cambio alguno sino, bien al contrario, más de lo mismo y multiplicado por diez. En pocas palabras, con Cospedal se destruye más empleo que nunca y se desmantelan los servicios sociales, la sanidad y la educación pública.
IU se sumó a esta protesta, justa y necesaria, y anuncia que estará siempre al lado de los débiles y defendiendo el interés general. Pierde el tiempo el que busque a IU en el bando de los que abusan del común y engañan a la opinión pública pidiendo resignación ovejuna.