El pleno de septiembre venía con asuntos de interés, de los que importan al pueblo y obligan a pronunciarse a los políticos.

El primero, las alegaciones presentadas por la alcaldía al plan hidrológico del Tajo.

Es sabido que el PP quiere asegurar para la Comunidad Valenciana y Murcia agua de Entrepeñas y Buendía sin que le importe si el río Tajo, mientras tanto, discurre seco o como reguerillo, porque esto es lo que le pasa al río cuando no llueve y se le cortan sus suministros legítimos en la cabecera y en los afluentes, que son como las arterias que salen de un corazón enfermo.

Sobre el plan hidrológico para el Tajo el portavoz de IU, Alvarado, empezó manifestando su desagrado por el hecho de que cada partido, también IU, reclame en una comunidad autónoma lo contrario que en la vecina, demostrándose claramente que las fuerzas políticas están fracturadas internamente en un tema tan elemental como el del agua.

A falta de doctrina clara sobre el tema del agua, Alvarado pidió analizar el asunto con cabeza, para lo cual, dijo, resultaba necesario partir de algunos hechos y cifras, a saber:

a) Que los pantanos de Entrepeñas y Buendía son del Tajo y no embalses para el Júcar y el Segura y que el Tajo desemboca en el Océano Atlántico y no en el Mar Mediterráneo.

b) Que el Tajo ya no pasa por Toledo, Aranjuez y Talavera en según qué épocas del año, con lo que parecen fábulas las dos vistas de Toledo que pintó el Greco (en una tercera, el Laocoonte, el río no aparece) en las que se ve un cauce fresco y abundante.

c) Que hay que corregir los libros de geografía en los que se afirma que los afluentes del Tajo procedentes de Madrid son el Jarama, el Alberche y el Guadarrama. El primero, porque ya no es río sino cloaca y los otros dos porque son engullidos por sendos pantanos en los que se guarda el agua para el consumo en la capital de España y en sus alrededores.

d) Que nunca nadie explicó en qué se consume el agua del trasvase que reciben las comunidades mediterráneas, aunque se sabe con certeza que en el pasado sirvió para convertir secarrales en campos de golf, propiciar el pelotazo urbanístico, construir aeropuertos imposibles y atesorar fortunas que hoy están ocultas en paraísos fiscales y afloran en sobrecillos comprometedores.

e) Que en la actualidad las cuencas que reciben agua del Mar de Castilla, las del Segura y las del Júcar, están al 67% y al 48’86% de su capacidad respectivamente, mientras que la cuenca cedente, a la que le sobra agua según Cospedal, no llega al 30%.

f) Que el Tajo, como cualquier otro río, precisa un caudal ecológico mínimo para sobrevivir y también unas reservas en la cabecera, no debiendo ser inferior la segunda cifra a 900 hm3, de los 2.474 hm3 de su capacidad máxima embalsable.

g) Que las estimaciones sobre las reservas anuales en los pantanos de cabecera han sido muy superiores a la realidad, mientras que sus aportaciones no han dejado de crecer. El resultado es evidente: los embalses están cada vez más secos, situación que se agravará a medida que se vayan cumpliendo las predicciones del cambio climático para nuestro país.

h) Que si se sobreexplota la cabecera se presiona a otros ríos menores, como el Henares y el Sorbe, por ejemplo, lo cual afecta directamente a nuestra ciudad.

i) Que la cuenca del Tajo colapsará si de ella sale más agua de la que entra. De seguir así, se corre el riesgo de que el Mar de Castilla se convierta en un remedo del Mar de Aral y el Tajo en una rambla. ¿Qué fue de aquel río en el que vivían peces regalados y de estima que relataba Cervantes, el Tajo dorado?

Expuesto lo anterior, el concejal de IU manifestó que el plan hidrológico, en lo que afecta al Tajo, es inconsistente y ahonda la crisis de un sistema fluvial muy maltratado por años de inconsciencia y abuso. Por este motivo, Alvarado apoyó las alegaciones presentadas por el alcalde, que también coinciden con las de IU de Castilla-La Mancha y que emanan del documento de alegaciones elaborado por la Plataforma en Defensa de los Ríos Tajo y Alberche.

Antes estas argumentaciones, el señor Moraga, portavoz del PP, leyó un renglones en los que se describía un Tajo que no existe, unos afluentes que no están y unos pantanos que no figuran, para mantener la falacia de que en Entrepeñas y Buendía sobra agua a partir de los 400 hm3 embalsados.

Subido a este montoncillo de mentiras el PP votó en contra de las alegaciones o, lo que es idéntico, a favor de continuar desecando la cuenca del Tajo, ya moribunda, lo cual no fue impedimento para que fuesen aprobadas por IU y el grupo socialista.

Tras este punto correspondía tratar la autorización de una transferencia de crédito de la partida de aportaciones al Consorcio de Bomberos (108.000 euros) a otras cinco del presupuesto, a saber, intereses de demora, amortización de préstamos a largo plazo, mobiliario de la casa de acogida, mejora de guarderías y gastos jurídicos de la administración general. El concejal de hacienda explicó que el fraccionamiento de la deuda del Ayuntamiento con el Consorcio permitía liberar 108.000 euros y destinarlos a otros fines. Tras su exposición, el portavoz de IU, Alvarado, pidió al gobierno municipal que recabara todos los datos del Consorcio con el fin de saber cuánto se le adeuda y cuánto debe cada administración, así como el montante anual de los gastos del Ayuntamiento en asesoría jurídica privada, peticiones que el Concejal de Hacienda se comprometió a satisfacer. El expediente de transferencia de crédito se aprobó con los votos favorables del grupo socialista y la abstención de IU y del PP.

Continuaba el orden del día con una dación de cuentas sobre el pago a proveedores. El portavoz de IU aprovechó su intervención para reclamar que la Junta devuelva inmediatamente lo que debe a nuestro municipio (como mínimo, seis millones de euros) y para mostrar su enfado por el trato que reciben los ayuntamientos en comparación con otras administraciones en lo tocante a la deuda. Alvarado dijo que le parecía intolerable que la Junta no afronte sus obligaciones ante los acreedores institucionales y que ningún poder político o judicial la fuerce a hacerlo, mientras que los ayuntamientos son compelidos a saldar sus deudas aunque para ello tengan que despedir a una parte de sus plantillas y subastar el escudo de la ciudad, llegándose al escándalo de que nuestro consistorio se ha visto obligado a pedir un crédito para pagar a sus acreedores porque a Cospedal no le da la realísima devolvernos lo que nos debe. La exigencia de que la Junta salde la deuda contraída con nuestra ciudad no admite más espera y el hecho de que el gobierno regional disponga ya de una línea de crédito ICO significa que Cospedal no podrá seguir pretextando que carece de peculio y que, por ello, vive en un estado de morosidad forzada.

Tratado lo anterior, entraba el pleno en el apartado de las mociones, dos del grupo socialista, una del grupo popular y dos de IU.

La primera moción del grupo socialista denunciaba el empobrecimiento de la educación perpetrado por los gobiernos estatal y autonómico. La segunda, exigía a la Junta de Comunidades presidida por Cospedal medidas urgentes a favor del empleo. El PP votó en contra de ambas mociones escudándose en la matraca de la herencia recibida y en que no hay dinero. No pudo contenerse el portavoz de IU, Alvarado, al escuchar estas palabras, reprochando al PP que el presupuesto público da para reflotar bancos, concesionarias de autovías ruinosas, constructoras amigas en quiebra y para sostener tele Castilla-La Mancha, ejemplo insuperable de propaganda y cutrerío, resultando inaceptables, por tanto, los recortes en los comedores escolares o en los planes de empleo. A pesar del voto en contra de los concejales del PP, las dos mociones presentadas por el grupo socialista fueron aprobadas con los votos a favor de los proponentes y de IU.

Acto seguido, el PP presentó una moción sobre los contenedores de recogida de ropa ubicados en la ciudad, que fue retirada por indicación del concejal de IU al considerar que tal asunto debería discutirse primero en el Consejo de Cooperación y no en el pleno, como hasta ahora había sido costumbre y conveniente.

Para concluir la parte resolutiva del pleno, IU defendió dos mociones. La primera, a favor de que las confesiones religiosas paguen los impuestos que les corresponden, sin exenciones ni prebendas, como todo hijo de vecino y, además, por la denuncia del concordato, que es el bastión en el que se refugia Rouco para no pagar al fisco, como Lola Flores se justificaba en la ignorancia para no hacer la declaración de la renta.

En la segunda moción, IU planteaba dotar un Fondo Municipal de Emergencia Social con cargo a la devolución de la deuda que el gobierno regional mantiene con nuestra ciudad.

Ante la primera petición, el PP salió con la historia sagrada de que la Iglesia católica recibe muy poco dinero de los presupuestos (unos 250 millones de euros al año) siendo tal cantidad, además, aportación voluntaria de los contribuyentes, el óbolo, y que, a cambio, devuelve mucho más en obras de caridad que lo que recibe. Como la respuesta del PP era esperable, el portavoz de IU, Alvarado, mostró que esos datos son falaces dado que la Iglesia católica recibe 278 millones al año del IRPF, 3.900 millones más en transferencias educativas, 700 millones para pagar las nóminas de los adoctrinadores en catolicismo que seleccionan los ordinarios diocesanos, otros 700 millones por el mantenimiento de hospitales, 25 millones para pagar a los capellanes de los cuarteles, hospitales y cárceles, 81 millones para Cáritas y otros 10 millones para Manos Unidas, lo que unido a otros piquillos de aquí y de allá hacen un total de 5.698.699.000 euros al año, cantidad a la que se suman los impuestos que no paga y que ascienden a una cifra que se mantiene en secreto para no soliviantar los ánimos del común.

Zanjada la discusión sobre la iglesia y sus ingresos la moción fue aprobada con los votos a favor de IU y del grupo socialista. El PP se abstuvo en tal cuestión porque su mundo sí es de este reino.

En la defensa de la segunda moción, el portavoz de IU pidió que se dotara un Fondo Social de Emergencia financiado con parte de la deuda que Cospedal mantiene con nuestra ciudad. El propósito de este fondo es doble: atender las necesidades más apremiantes de los vecinos y evitar que la crisis provoque un conflicto entre los pobres que necesitan ayuda y los que aún son más pobres y la reciben a costa de los primeros. La moción fue aprobada con los votos a favor de IU y del grupo socialista y la abstención del PP.

Recapitulemos el asunto de las mociones, para una mejor comprensión de la actitud del PP.

El Partido Popular votó a favor de los recortes en educación, que tanto perjudican a los alumnos azudenses, al que su partido les quita las becas, les echa de los comedores escolares, les sube las tasas, les cierra las puertas de las universidades y les quita los profesores que necesitan.

Los concejales del PP también votaron en contra de que Cospedal fomente el empleo, ahora que en Castilla-La Mancha, comunidad en la que gobiernan, las cifras del paro son escandalosas y superan todas las marcas históricas, con una tasa del 30%, esto es, un cuarto de millón de desempleados, con un paro juvenil del 60%, habiendo subido un 25% la cifra total de desocupados desde que el PP llegó al poder.

Tampoco apoyó el PP la petición de que las confesiones religiosas paguen los mismos impuestos que el resto de los mortales, ahora que tanto se necesita recaudar para impedir los recortes en sanidad, educación y pensiones, por ejemplo.

No satisfechos con todo lo anterior, los concejales del PP tampoco concedieron su favor a la creación de un Fondo de Emergencia Social municipal con cargo a la deuda que el gobierno regional mantiene con nuestra ciudad, en abandono consciente de los vecinos más castigados por la crisis, muchos de los cuales, seguro, les votaron en las últimas elecciones engañados por sus promesas electorales.

Dicho con parquedad: mientras el PP de Azuqueca de Henares se pronuncia contra los estudiantes, los parados y los marginados, se arrima a la Conferencia Episcopal, que es una cúpula que quiere mantener el diezmo y el privilegio consistente en atesorar propiedades y fincas sin pagar al fisco por ellas, como corresponde y manda la Constitución, en oposición nada cristiana al mandato franciscano que predica la pobreza, la humildad y la sencillez, y todo ello sin provocar el repudio de los suyos. Asombroso.

Concluida la parte resolutiva del pleno, el portavoz de IU aprovechó para hacer cuatro preguntas al gobierno municipal. La primera, al concejal de deportes, sobre la propuesta de la empresa concesionaria de la piscina municipal cubierta de rebajarles un 15% el sueldo a los trabajadores, a lo cual el concejal respondió que ese mismo día se había reunido con la empresa indicándole ésta que renunciaba a tal pretensión. La segunda, al concejal de movilidad, sobre las terrazas de verano, haciéndole la observación de que algunas podrían ocupar más espacio del concedido y otras que están situadas en lugares muy poco adecuados como aparcamientos en calzadas estrechas o de tráfico muy considerable, con el consiguiente peligro para los vecinos que se sientan en ellas. El concejal responsable, señor Blanco, dijo que todas las terrazas contaban con un estudio previo que autorizaba las ubicaciones y que, no obstante, reforzaría la labor de inspección por si hubiera algún abuso. La tercera pregunta iba dirigida también al señor Blanco y se refería al cableado que cuelga de las casas de la calle Mayor, que afea mucho una zona de la ciudad céntrica y remodelada en la anterior legislatura. El concejal responsable dijo que la retirada del cableado corresponde a empresas privadas y que el Ayuntamiento insiste en que lo hagan aunque con poco éxito a la vista del resultado. Para concluir, el portavoz de IU formuló una pregunta y un ruego al concejal de fiestas, señor Casas. La pregunta consistía en saber su opinión sobre la bondad de un cambio en la composición de la comisión de fiestas con el objeto de renovar el programa de festejos y hacerlo más participativo. El ruego, una vez concluidas las fiestas de septiembre, era el mismo que otros años: que informara a la oposición lo antes posible del gasto y de los ingresos de la feria mayor. En cuanto a la pregunta, el concejal se salió por la tangente, como si tuviera miedo a mojarse, diciendo una obviedad que no respondía a lo planteado. Con respecto al ruego, se comprometió a proporcionar las cuentas con la misma falta de diligencia que otros años, esto es, con siete meses de retraso, a lo cual ya le decimos que no.

Así terminó un pleno en el que el PP se retrató una vez más como el partido al que no le tiembla la mano cuando hay que recortar a los débiles y que está siempre con el poder establecido porque él y el régimen son lo mismo.

Los que votaron al PP, muchos de los cuales ahora callan, no deberían olvidar lo que hace el PP allí donde gobierna. El PP mintió en la campaña electoral, destruyó pruebas para tapar su corrupción interna, recibió presuntamente sobornos de grandes empresas, cobró y pagó en negro en cantidades industriales y ahora que gobierna en casi toda España, protege a sus corruptos mientras asfixia a los ciudadanos con impuestos, recortes, pérdida de derechos y de salarios.

Carlos Fabra, Matas, Camps, Barberá, Bárcenas, la trama Gürtel, Baltar, Ignacio González, Castedo, Cospedal, Mato, Conde Roa, Rato … La lista de dilapidadores, imputados, condenados, sospechosos, mentirosos y encubridores presuntos del PP es insoportablemente larga y corresponde a los votantes de ese partido castigarlo en las urnas como merece.

No se olvide que a veces los pueblos tienen los gobernantes que se merecen.