El 17 de enero vino Carme Chacón a nuestra ciudad para arropar al candidato del PSOE a la alcaldía de Azuqueca de Henares, en un acto llamado asamblea abierta.
Carme Chacón, que fue Ministra de Vivienda los años 2007 y 2008, inventó el desahucio exprés, gran aportación al bienestar de las familias españolas e hito que será consignado en los libros para enseñanza de los que nos sucedan.
El PSOE no pudo escoger visitante más apropiado. Felicitaciones sinceras.
En los años febriles del pelotazo inmobiliario, en el momento en el que se estaba fraguando la explosión de la burbuja especulativa, esta exministra, Chacón, tuvo la iluminación de que el problema de la vivienda se arreglaba legalizando el desahucio por el impago de un solo mes de alquiler, para lo que instituyó juzgados especiales, cambios legislativos y otros medios.
Chacón demostró que cuando se quiere dejar a una familia sin techo la administración no debe escatimar en gastos, porque es muy justo acabar con la opresión que el pobre ejerce sobre el rico. Ya se sabe, se evita un desahucio y la familia beneficiaria acaba exigiendo caviar beluga para la meriendas.
Es un sentimentalismo barato ablandarse por los llantos de una familia al borde del desahucio o por los desesperados que se tiran por la ventana antes de ser arrojados judicialmente de su casa. Fueron unos treinta los que así nos abandonaron. No hay estadística oficial sobre el asunto ya que de las insignificancias no se habla.
Personas como Chacón contribuyeron a que fuese una instancia supranacional, el Tribunal de Estrasburgo, la que abriera el camino para defender judicialmente a las personas en proceso de desahucio, porque siempre ocurre, allí donde no hay decencia, que no hay amparo más imposible que el que se pide en casa.
Qué tarjeta de presentación más estupenda para el señor Blanco: una desahuciadora institucional alabando sus virtudes y su sensibilidad social. No se puede pedir más.
Extraña mucho el nulo revuelo que ha producido esta visita entre la ciudadanía. No sabemos si por hartazgo, desidia, desconocimiento o por una mezcla de razones, pero así ha sido, misteriosamente. En cualquier caso, no podíamos resistirnos a consignar el acontecimiento porque no todos los días nos honran con su presencia personas tan eméritas.
Que Chacón venga a vernos demuestra que somos una ciudad muy abierta y hospitalaria. Que siga siendo así.